MEDITACIÓN EN LUNA LLENA DE VIRGO
Cada luna llena es una invitación a participar en la restauración de nuestra tierra y todo lo que en ella habita, principalmente nosotros, la humanidad.
Esta maravillosa instancia astronómica, el plenilunio, nos envuelve a todos sin distinción, y es en este momento en que ofrecidos al servicio, podemos acceder a la Luz , el Amor y la Voluntad al Bien establecidos para la raza humana desde los inicios.
Servimos como la luna, que recibe la luz del sol y nos la refleja trayendo claridad en la oscuridad. Así mismo, como grupo, nos impregnamos de la Luz divina y la irradiamos a toda la creación.
Cada constelación zodiacal nos trae un aprendizaje, una tarea. Es plenilunio de Virgo, la Virgen, la madre, la materia.» Soy la Madre y el Hijo, soy Dios, soy materia» es su pensamiento semilla, invitándonos a percibir la grandeza en lo pequeño, en lo simple, en lo cotidiano porque en esas mínimas instancias, Dios está manifiesto. La materia es pues sagrada, nuestro planeta y todo lo que en éll existe, es pues sagrado.
Que cada acto de nuestras vida, incluyendo nuestras rutinas diarias se realicen en plena conciencia y se transformen en actos de amor y de servicio.