El 21 de junio entra el sol en Cáncer, se considera importante estar alineados para el Solsticio y durante todo el mes, por la bella oportunidad que el corazón confiere. Llegar al corazón es la meta de todo buscador sincero.
En términos involutivos este signo se relaciona a los afectos, la familia y los apegos, todo ello vinculado a la forma emocional de vincularse (por oposición a la forma del corazón). Sin embargo en términos evolutivos Cáncer se relaciona con el amor incondicional y la posibilidad de contactar, en el corazón, con el Maestro.
La entrada del sol en Cáncer podría por tanto, ser empleada para meditar en la siguiente secuencia:
1- Contactar nuestro corazón – El centro de paz y luz que permite elegir bien y confiere la fuerza para cumplir lo elegido.
2 – Ser guiado por el corazón. Dado que llegar al corazón supone sobreponerse a muchas fuerzas que actúan en sentido descendente – tanto propias como del medio – la tarea de llegar requiere seguir la enseñanza de un Maestro de Sabiduría. Seguirla es la primera forma transformadora de estar en contacto con el Maestro, ya que todos ellos confieren su presencia y su ayuda cuando el aspirante es sincero y constante. Los Maestros recomiendan que al menos leamos una página diaria de alguno de sus libros de sabiduría, hacerlo es transformador. Gracias a Alice Bailey tenemos la enseñanza del Maestro Dual Khul, gracias a Elena Roerich la del Maestro Morya, gracias al Bahavad Gitta podemos contactar las enseñanzas de Krishna. Con Parvathi Kumar podemos leer a Maitreya el Señor, al Maestro Saint Germain, al Maestro Koot Humi, al Maestro EK y al Maestro CVV entre otros. La sabiduría nos ha sido dada desde todos los ángulos, nos protege, nos guía, nos eleva. Es accesible con la sola condición de que comprendamos que nuestra sed, es sed de luz.
3 – Contactar a un Maestro. Dice el Maestro Parvathi Kumar “ Es por pura gracia que un buscador encuentra a un Maestro del sendero de Raja Yoga, ya que el Maestro guía, entrena y protege al estudiante de la propensión a caer. Muchos son los beneficios de asociarse con un Maestro en el plano físico, para lo cual el preludio consiste en asociarse regularmente con las enseñanzas del cualquier Maestro del sendero de Raja Yoga.
En primer lugar: el Maestro ratifica longevidad al estudiante.
En segundo lugar: confirma una salud funcional, de manera que el estudiante no quede incapacitado por la mala salud.
En tercer lugar: el Maestro ayuda a resolver los rasgos problemáticos de la personalidad del estudiante. El estudiante tiene una gran posibilidad de caer debido a lo inadecuado de su personalidad. El Maestro ayuda sutilmente para que el estudiante permanezca intacto en el sendero.
4 – Llegar al corazón del Maestro. Quizás nos sea difícil imaginar este estadio, pero si conocemos un instructor real, sabemos que él alude en ocasiones a Su Maestro con un amor absoluto; sabemos que ese amor es el motor de sus acciones y el secreto de su vitalidad inagotable y del orden impecable de su acción. La regla es siempre la misma: la pureza del corazón del discípulo determinará lo cercano del contacto. El Maestro siempre está disponible, el obstáculo nunca está en Él. Si hay verdadera pureza, el trabajo del Maestro puede ocurrir a través del discípulo, el trabajo siempre es de elevación del medio, de servicio. No hay mayor esplendor que ser canal del Maestro.
(Es interesante saber que comparten el mismo Maestro Abraham Lincoln, José de San Martin y Simón Bolívar).
El Maestro y Cáncer
Se nos invita a esta reflexión en Cáncer porque El Maestro da su presencia en el centro cardíaco, y el corazón es regido por Cáncer. Por lo tanto, desde la antigüedad, la Luna llena de Cáncer es celebrada como la luna llena del Instructor. De ahí que el solsticio de verano nos provee con una gran oportunidad para alinearnos a nuestra alma, que aspira a la presencia del Instructor y por lo tanto, recibir la Luz.
La asimilación de la luz
Para que nuestro cuerpo asimile la luz, necesita que el alimento que se ingiere esté lleno de luz – vegetales frescos y frutas que han recibido grandes cantidades de rayos solares, y también agua fresca y jugos. Con buenos materiales, el tejido corporal se refina y podemos construir cuerpos delicados pero poderosos. Las Escrituras, por lo tanto proponen que desde el Solsticio en delante, reorganicemos nuestra dieta, hacer respiraciones conscientes y profundas y absorber los rayos Solares a través del cuerpo. Esto permite un mejor flujo del Prana y construimos una casa ligera y llena de luz para vivir en ella como almas. Es como si volviéramos a entrar de nuevo en las formas de nuestro cuerpo. Nuestras casas deberían también ser puras, llenas de luz y limpias.
Los primeros cuatro grados en Cáncer
Son de importancia particular, nos dice el Maestro Kumar: “Si por la correcta orientación, invocamos al Señor hacia nosotros, Él viene y habita de nuevo en nuestros corazones. El Hombre Celestial, actuando a través del Dios Solar, es el original y nosotros somos sus copias. Cuando él entra en nosotros, fortalece su arquetipo en nuestro sanctum interno, el loto cardíaco. Su impulso electromagnético moldea nuestra forma de acuerdo a su forma. Al irse moviendo hacia nosotros y nosotros en él, el Plan solar se ejecuta a través de nosotros. Ésta es la iniciación que recibimos en conexión con el solsticio de verano. Por lo tanto se recomienda, en el solsticio de verano y en Cáncer, la contemplación en el descenso del Dios Solar en nosotros.”
El Curso del Sol hacia el Norte y el Sur
Visto desde la Tierra, existe un curso del Sol hacia el Norte y el Sur. El eje Terrestre realiza un movimiento de inclinación y lo experimentamos como el movimiento aparente del Sol hacia el Sur, hacia el Norte y de regreso.
El significado de los solsticios no depende de que se viva en el hemisferio norte o en el sur, es fácil creerlo dado que cuando en el Norte comienza el verano, en el Sur comienza el invierno. Desde el punto de vista de la alineación con la energía, (que un sistema energético menor -el nuestro- se coordine con uno mayor – el zodiaco- ) el Solsticio de Cáncer marca la trayectoria sur del sol para ambos hemisferios, así como el de Capricornio marca la dirección Norte también para ambos.
En el curso del sol hacia el norte, ( los 6 meses desde Capricornio hasta Cáncer) hay un movimiento hacia arriba, fuera de la materia, espiritualmente significa el ascenso del alma sobre la materia. En el curso hacia el sur, ( los siguientes 6 meses) el movimiento lleva hacia la materia.
Advertencia
Si en el momento del solsticio de verano, con el ángel solar que comienza el proceso descendente la conexión a la luz no se fortalece conscientemente, con facilidad olvidaremos las intenciones del alma en los meses venideros, y nos dejaremos llevar por la actividad cotidiana.
Podemos favorecer la conexión con la luz a través de la meditación, la visualización mental de las energías y el recuerdo. Si lo logramos podemos continuar el ascenso durante el arco descendente del año y emplear el descenso de la energía para una buena manifestación.
Que podamos aprovechar la oportunidad que el mes nos ofrece, visualizando luz dorada en nuestro corazón y meditando de forma regular.
ISABELLA DI CARLO